En el marco de la cercanía de las festividades y festejos de fin de año, desde la secretaría de Salud se brindan una serie de pautas a tener en cuenta a la hora de preparar y conservar los alimentos.
Desde el área, se recalcó que lo importante es evitar la presencia de bacterias peligrosas que causan Enfermedades Transmitidas por los Alimentos (ETA). Esto se produce cuando comemos alimentos y/o bebemos agua que contiene gérmenes peligrosos en cantidades suficientes para afectar nuestra salud. Poner en práctica medidas básicas sobre higiene alimentaria puede ayudar a prevenirlas.
Antes de la preparación de los alimentos, es importante mantener la higiene, tomando los siguientes recaudos:
- Lavar las manos con agua tibia y jabón durante 20 segundos antes, durante y después de manipular alimentos. ¿Cuándo lavar las manos? Después de: ir al baño; tocar animales;
manipular dinero; sonarse la nariz, estornudar o toser; tocarse la cara, nariz u otra parte del cuerpo; cambiar pañales; utilizar productos de limpieza; tocar o sacar la basura y fumar.
- Desinfectar las superficies que tengan contacto con los alimentos (tablas para cortar,
platos, utensilios, mesadas) antes de comenzar a preparar cada alimento, después de
prepararlos y antes de continuar con el siguiente.
En el caso de los alimentos que requieren cocción, tener en cuenta que:
- Los alimentos se cocinan completamente cuando alcanzan una temperatura interna superior a los 70º C. La forma más segura de saber si los alimentos han alcanzado la temperatura correcta de cocción, es a través del uso de un termómetro para alimentos.
- Cocinar las carnes y comidas que llevan carne picada o trozada hasta que no queden partes rojas o rosadas en su interior.
- Cocinar los huevos hasta que la clara y la yema estén firmes. Evitar las recetas que
contengan huevos crudos.
- Cocinar el pescado hasta que esté opaco y se desmenuce fácilmente con el tenedor.
- Las carnes, aves rellenas o el mismo relleno se deben colocar inmediatamente, después de prepararse, en un horno ajustado a no menos de 162.8ºC. Se debe utilizar un termómetro de alimentos para asegurar que el relleno alcance una temperatura mínima interna de 74ºC.
Por otro lado, en el caso de los alimentos que no requieren cocción:
- Lavar minuciosamente las frutas y verduras con agua potable, preferentemente corriente.
- Evitar la contaminación cruzada. Los alimentos crudos, en especial la carne, el pollo, el
pescado y sus jugos pueden contener microbios peligrosos que pueden contaminar otros
alimentos durante la preparación y el almacenamiento de la comida.
- Separar los alimentos crudos de los cocidos o listos para consumir en todo momento:
cuando compre sus alimentos, durante su preparación y almacenamiento.
- Utilizar equipos y utensilios diferentes, como cuchillas o tablas de cortar, para manipular
carnes y otros alimentos crudos. Entre un uso y el siguiente, lavar y desinfectar todos los
utensilios.
- Conservar los alimentos en recipientes separados para evitar el contacto entre crudos y
cocidos.
¿Cómo conservar los alimentos a temperaturas seguras?
- Conservar las comidas preparadas en la heladera.
- No dejar alimentos cocidos y alimentos perecederos a temperatura ambiente durante más de dos horas. Mantener los alimentos refrigerados hasta el momento de servirlos,
especialmente los más peligrosos.
- Para asegurar de que la temperatura de conservación sea la correcta, verificar que la
temperatura de su heladera sea menor o igual a 5ºC; y la del freezer de -18ºC.
- Durante el traslado de alimentos de un domicilio a otro, asegurarse de que no estén a
temperatura ambiente por más de 2 horas.
- Las sobras no deben guardarse en el refrigerador durante más de 3 días ni recalentarse
más de una vez.
- Nunca descongelar los alimentos a temperatura ambiente. Se pueden descongelar con mayor seguridad: en la heladera, en el horno de microondas (sólo si se cocinara inmediatamente), como parte de la cocción (si fueron congelados en porciones chicas pueden cocinarse directamente).
- Recalentar completamente los alimentos cocinados. Al recalentar los alimentos, los
mismos deben alcanzar como mínimo 75ºC.
- Mantener la temperatura adecuada para cada alimento a servir en la mesa. Es decir, que los alimentos calientes se mantengan a dicha temperatura y los alimentos fríos se conserven fríos.
- En lugar de servir la comida en una fuente grande, es aconsejable colocarla en varias
fuentes pequeñas.
- Conservar en la heladera las fuentes de comida hasta el momento de servir, y rotar los
alimentos. Evitar que permanezcan a temperatura ambiente más de 2 horas.